Triángulos poéticos

Hay semanas en las que la poesía brota de los lugares más sospechados.

El miércoles Philippe Jaccottet nos dejó a todos sin palabras con su recital de poesía que cierra el ciclo que el CBA y Jordi Doce han organizado tan bien. Qué capacidad de transmisión la de este hombre, qué elegancia, qué ritmo, que cadencia, qué poesía por Dios. Como decía la señora y poetísima Salas, es hasta guapo, a pesar de tener 82 añitos.

ELLE S'APPROCHE du miroir rond
comme une bouche d'enfant
qui ne sait pas mentir,
vêtue d'une robe de chambre bleue
qui s'use elle aussi.

Cheveux bientôt couleur de cendre
sous le très lent feu du temps.

Le soleil du petit matin
fortifie encore son ombre.


El segundo postre llegó de la mano de Radiohead en Barcelona, el pasado jueves. Tercera vez que los veo y tercera vez que consiguen ponerme la piel de gallina con esas arquitecturas sónicas a la vez bellas y experimentales. Veinticinco canciones, más de dos horas de poesía, y todavía podríamos estar allí, el Mediterráneo a la espalda.

"we are accidents
waiting waiting to happen."

Recuerdos de un no recuerdo en:

"Because we separate
it ripples our reflections"

Y luego, ese final apoteósico en la sala Razzmatazz, referencia al cúltico Pulp, con miles de personas cantando cuando el local estaba cerrado, luces blancas encendidas, ese himno generacional llamado "Creep", en total comunión con un DJ que no le importaba pasar la noche discutiendo con la poli para hacernos felices y permitir la maravilla de no dormir, del insomnio elegido.

El triángulo se cierra con el nuevo libro de Juan Carlos Mestre, "La casa roja", quien ha tenido la amabilidad de pintarme hoy un cuadro de artista total, porque eso es lo que Juan Carlos es, en la portada de su primera y dionisiaca "Antífona". En cuanto tenga un hueco, haré un pequeño comentario del nuevo poemario de Juan Carlos, tanto tiempo esperado. Tan necesario.